Ralph McQuarrie fue el creador del espectacular diseño de los personajes, planetas y naves de la trilogía original de Star Wars.
¿Quién fue Ralph McQuarrie?
Este Concept Designer nació en el seno de una familia de ilustradores, sus abuelos y su madre fueron su mayor influencia para adentrarse en el mundo del diseño. Se graduó como ilustrador en la Art Center College of Design de Los Ángeles y posteriormente a inicios de los años 70 conoció al cineasta Hal Barwood que lo invitó a producir algunas de sus obras y es en el medio cinematográfico que conoce a George Lucas quien al ver la gran capacidad artística con la que cuenta lo invita a acompañarlo en la creación de una de las obras más importante del siglo XX: Star Wars.
Su participación fue más allá de la propuesta gráfica diseñando desde cero a personajes como Chewbacca y Darth Vader, además del ilustrar detalles precisos que tenían que ver con el funcionamiento y estética visual de muchos componentes como lo fue el icónico casco de Darth que no solo diseñó para ser imponente sino para tener la facultad de montar un respirador o implantar una bocina en él. Este grado de precisión aplicó también en las armas como los sables láser que hicieron las batallas completamente creíbles, además en sus diseños maquetó elementos que ayudaron al trabajo de otros departamentos como el de vestuario.
Las piezas diseñadas a mano mostraban su total dominio del color e iban más allá de lo que decía el guión pues mostraban planteamientos de tomas de cámara que fueron sumamente valiosas para el rodaje de las películas.
McQuarrie fue un visionario
Diseñaba prácticamente lo que fuera pues no se limitaba a solo un área; creó gran parte de las piezas de la trilogía, lo que lo hizo un Concept Designer invaluable al hacer aportaciones gracias al gran marco de referencias con el que contaba e incluso contó con un ojo cinematográfico y narrativo que le permitió ser inspiración para todas las entregas que tuvo Star Wars en la posteridad.
El dibujo fue la primera representación real de objetos, ideas y sucesos por lo que su origen se remonta a la prehistoria. Los primeros dibujos conocidos datan de 30,000 a 10,000 a.C y fueron hallados en las cuevas y superficies de herramientas primitivas en Francia y España.
Antigüedad
A partir del año 3,000 a.C. los egipcios decoraban las paredes de sus templos y tumbas con escenas de la vida cotidiana y posteriormente los griegos en sus jarrones de cerámica decorados y edificaciones mostraron su gran capacidad artística y expresión comunicativa.
Edad Media
Durante la Edad Media (a partir de los años 400 hasta los 1,400) las representaciones se apegaron a lo religioso fusionando las pinturas en la ilustración de las Biblias lo que ayudó a los artistas a mantener un registro de sus creaciones compilándolas en libros que se copiaban por otros artistas en lugar de trabajar con figuras en vivo.
El Renacimiento
En 1400 durante el Renacimiento nació un amor especial por el dibujo y se comenzó a considerar como la base de estudio de todas las artes y herramienta fundamental también para el estudio de la naturaleza. Los artistas comenzaron a dibujar a partir e modelos desnudos y la representación de la figura humana cada vez fue más realista.
El Barroco
En el periodo barroco (entre 1600 y 1700) los dibujos fueron más vivos transmitiendo forma, movimiento y emociones. Los paisajes se volvieron más comunes pues los artistas iban al campo con un cuaderno de bocetos y producían dibujos o estudios que posteriormente completaban en su estudio.
Entre los años 1800 y 1900 se desarrollaron diferentes estilos y los lápices fabricados a principios del siglo XIX se convirtieron en la herramienta preferida para muchos artistas. A principios de la década de 1900 la definición de dibujo se amplió al surgir las corrientes del arte occidental representadas en el cubismo, el expresionismo y el postmodernismo.
Siglo XXI
Actualmente los artistas siguen expresándose a través del dibujo y son mediante las herramientas digitales que sus creaciones pueden llegar a públicos y lugares inimaginables.
Siguiendo los pasos de sus abuelos y su madre, también se interesó por el dibujo. Trabajó como ilustrador en la Boeing Aircraft Company. Se graduó en Ilustración en el Art Center College of Design de Los Ángeles. En los años 60 realizó animaciones para la NASA y para la CBS (retransmisiones de las misiones Apolo). A comienzos de los 70, efectuó un trabajo para Hal Barwood, quien buscaba productor para un proyecto cinematográfico. George Lucas, amigo de Barwood, vio los dibujos y decidió incorporar a McQuarrie a su propia aventura espacial. Le encargó las imágenes que acompañarán la presentación del proyecto a los estudios.
El universo de Star Wars ha cautivado a audiencias a lo largo de más de cuatro décadas.
Tanto los personajes de la saga como los actores que los interpretan forman ya parte de la cultura popular, y el nombre de la mente creadora de este universo, George Lucas, es historia viva.
Con motivo del mundialmente reconocido Star Wars Day (4 de mayo, por el juego de palabras en inglés "May the 4th"), celebramos hoy la contribución de un artista que, aunque menos conocido que el creador de la saga, comparte gran parte del mérito en el desarrollo de la imagen y el alma que caracteriza a Star Wars. Se trata de Ralph Angus McQuarrie, el ilustrador y diseñador del Concept Art de la trilogía original de esta saga.
Ralph McQuarrie fue un diseñador conceptual y artista futurista a quien el director George Lucas eligió desde el primer momento para materializar el universo que tenía en su mente. Impresionado por su trabajo, Lucas contactó con él mucho antes de que la primera película de la saga, Star Wars: Una nueva esperanza, empezara su etapa de producción, y en 1975 le encargó que ilustrara algunas escenas de su guion.
Gracias a sus vívidas y originales ilustraciones, George Lucas logró convencer a los ejecutivos de 20th Century de que se arriesgaran a producir la que luego se convertiría en una de las sagas más lucrativas e influyentes de la historia. Por tanto, se puede decir que la perspectiva artística de McQuarrie no solo marcó el rumbo del aspecto visual que tendrían las películas, sino que fue fundamental para su propia existencia.
Curiosamente, McQuarrie siempre aseguró que esas ilustraciones, no habían sido creadas para hacerse públicas, y que, si hubiera sabido la difusión que iban a tener, hubiera intentado hacerlas mejor.
La revolución del Concept Art
La influencia de McQuarrie va más allá del aspecto visual de ambientes, arquitectura y paisajes. Fue él quien diseñó la apariencia que tendrían personajes tan emblemáticos como Chewbacca, R2-D2, C-3PO o incluso el mismísimo Darth Vader.
De hecho, su influencia se extiende incluso a la propia historia, ya que fue el mismo artista el que sugirió que Darth Vader llevara el famoso respirador que le caracteriza. Esta anécdota demuestra la importancia que tiene el concept art y la repercusión que la perspectiva visual de estos artistas puede tener en el alma de los universos cinematográficos.
Como dijo George Lucas:
"Más allá de las películas, su arte ha inspirado al menos a dos generaciones de jóvenes artistas - los cuales aprendieron gracias a Ralph que las películas se diseñan."
Más allá de Star Wars, McQuarrie también trabajó y marcó con su perspectiva única la serie televisiva Battlestar Galactica, y películas como E.T. o Cocoon, con la que ganó un Oscar.
Manteniendo vivo el mundo futurista de McQuarrie
Aunque McQuarrie murió en 2012, su obra sigue viva tanto en el imaginario colectivo de todos los fans de estas películas, como en la producción de la más reciente trilogía.
En Star Wars: Los Últimos Jedi, estrenada en 2017, el director Rian Johnson se basó en el concept art de McQuarrie para diseñar algunos de los planos más destacados de la película, como el del climático momento en que Luke Skywalker se enfrenta a Kylo Ren. Aunque el plano no es una réplica exacta de la ilustración de McQuarrie, se utilizó como referencia para su estética y ambiente. McQuarrie forma parte del universo Star Wars de forma tan intrínseca, que es imposible separar la saga de su visión artística.
Su contribución se celebró incluso con un cameo: en Star Wars: El Imperio Contraataca, los más atentos verán a un tal general Ralph McQuarrie aparecer unos instantes en pantalla.
A pesar de su breve presencia en la saga, se le dedicó a este "personaje" un muñeco con motivo del trigésimo aniversario de la saga. Un pequeño detalle que agradece de manera sutil el increíble impacto que tuvo la obra del que George Lucas considera “un padre generoso para la revolución del arte conceptual que nació de su trabajo” y asegura que su memoria siga viva en nuestro mundo y en el de una galaxia muy, muy lejana.